La escobilla del water... ¿dónde la pongo?
De nuevo el tradicional afán de superación taxonenco golpea con contundencia a la comunidad científica. De la mano del ciudadano taxonés, ese Gran Reciclador, el resto del mundo podrá disfrutar en breve de un cuarto contenedor de basuras que viene a completar las carencias de los tres anteriores. La cosa quedará así:
1.- Contenedor verde: Vidrio.
2.- Contenedor amarillo: Plástico.
3.- Contenedor azul: Papel.
y, por fin (¡atenta Historia!):
4.- Contenedor transparente: Artículos para el hogar.
Se acabó el almacenar en el trastero la taza del wáter, la barra de la cortina de la ducha con sus 16 anillas o la alfombra pseudo-persa que tanto nos gustó cuando la compramos en IKEA. Venga vecino, ahí lo tienes ¡a reciclar!
El contenedor transparente, junto con el semáforo Ever-green y el asfalto mega-hyper-sonoro, pasará a formar parte de las aportaciones científicas que La Taxonera brinda de forma desinteresada a la Humanidad para su uso y disfrute.
Lo sentimos Sarrià, se nos ha ocurrido antes a nosotros.
1.- Contenedor verde: Vidrio.
2.- Contenedor amarillo: Plástico.
3.- Contenedor azul: Papel.
y, por fin (¡atenta Historia!):
4.- Contenedor transparente: Artículos para el hogar.
Se acabó el almacenar en el trastero la taza del wáter, la barra de la cortina de la ducha con sus 16 anillas o la alfombra pseudo-persa que tanto nos gustó cuando la compramos en IKEA. Venga vecino, ahí lo tienes ¡a reciclar!
El contenedor transparente, junto con el semáforo Ever-green y el asfalto mega-hyper-sonoro, pasará a formar parte de las aportaciones científicas que La Taxonera brinda de forma desinteresada a la Humanidad para su uso y disfrute.
Lo sentimos Sarrià, se nos ha ocurrido antes a nosotros.